Cosas viejas

Abri la ventana mire hacia afuera y bum! vi ese monton de hojas secas el el patio. Hasta este momento no habia realizado que llego el otoño. Habia sentido el friito colandose por debajo de mi falda y enfriando mis pantihoses en las mañanas, pero como siempre! la conversacion en el celular o la preocupacion de perder el tren, o tal vez el buenos dias y la obligada conversacion con los vecinos que toman el elevador a la misma hora me habian impedido notar que los arboles estan perdiendo sus hojas, que el cielo se volvio amarillo, las nubes mas blancas y ese friito mudo ya estaba haciendo estragos y colandose tambien en mis pulmones. Cuantas primaveras, veranos, otoños me he ido perdiendo por vivir tan de prisa? Maravillosamente hoy no tenia mucho que hacer, como estoy renovando la casa la computadora esta desconectada. Estando tumbada en el sofa escuche un ruido afuera, eso me llevo a levantarme y observar desde esta ventana, como a cambiado el ambiente afuera, pero mas aun, como ha cambiado la vida desde hace tantos años que mis recuerdos son de hace tanto tiempo que no puedo recordar de cuando. Y pense! de cuando son mis recuerdo? por ejemplo la ultima que sonrei a carcajadas sin preocupacion fue hace años, recuerdos como navidad, la familia reunida, beber cervezas disfrazada en envases de refresco en el parque en el verano, los viajes a Santo Domingo a encontrarme con viejos amigos, jartarme de helado de bizcocho en las noches hasta tener pesadillas en la madrugada, celebrar los cumpleaños, hablar de "hombres, de Moda, de los hijos" por telefono con las amigas por horas hasta que me dolian las orejas era algo cotidiano. Hace tanto tiempo que ya no guardo nada en la memoria, todo es como vivir sin guardar nada, solo usar las cosas, actualizarte cada dia, levantarte y seguir. Como robot, como si estuvieramos progamados. Sin sentir la vida como vivir y no sentir. De repente me levante como automata y fui a buscar en esas cajas que encontre el closet llenas de polvo durante la renovacion de mi cuarto, necesitaba encontrar recuerdos y alli debian haber muchos. Entonces en la esquina de un cajon de madera donde guardo recuerdos viejos de personas que ya han muerto, de pasados irreversibles, papeles que no sirven para nada pero que yo conservare toda la vida, petalos de flores que murieron hace tiempo, y fotografias de varias epocas de distintas poses de una niña que sonreia feliz y que al mirarla solo por el gran parecido pienso que podria ser yo. Alli estaban, mis dos cuadernos; razgados y maltrechos de ver pasar tantos años. Hace tiempo escribia poesias en ellos, las inventaba tambien hay algunos cuentos y les pintaba mariposas y floresitas de colores alrededor. La tinta se ha ido aclarando tanto que algunos poemas y frases de amor ya no son creibles, leibles, pensables. Los lei de nuevo todo el tiempo tratando de explicarme como y donde estaba yo en esas letras. Preguntandome porque deje de soñar, de sonreir hasta las lagrimas, de vivir despasito y saborear cada dia cada momento cada comida, porque deje de hacer lo que me gusta y en que momento empeze a hacer lo que les gusta a los demas. Sintiendome ridiculamente complacida con cada rima, cada verso. Algunos lineas sonaban tan ridiculas que hasta senti orgullo de saberme tan ilusa en algun tiempo. Cuando habia estado yo tan enamorada de la vida? Tome los cuadernos y los abraze a mi pecho, me acoste en la cama y llore, llore tanto que las lagrimas comenzaron a borrar los recuerdos, no por nostargia, llore porque se que mañana se ira el otoño, vendra el invierno, despues la primarera, y yo nisiquiera me voy a dar cuenta.